El gobierno boliviano justificó este miércoles la intervención policial de un canal privado de televisión, de línea opositora, en la ciudad de Cochabamba (centro), con el argumento de que no tenía domicilio legal y había invadido otras frecuencias del espectro electromagnético.
“El canal Somos Bolívar de Cochabamba estaba realizando transmisiones ilegales desde la calle 25 de Mayo, número 147. Esa dirección no fue autorizada por su otorgación de licencia”, afirmó Clifford Paravicini, director de la Autoridad de Telecomunicaciones y Transporte (ATT), que promovió la acción.
La dueña del canal, Marianela Montenegro, una dura crítica del presidente izquierdista Evo Morales, había denunciado el martes “el violento ingreso de unos 30 policías” y aseguró que los uniformados se llevaron equipos tecnológicos de transmisión en Cochabamba, 400 km al este de La Paz.
Montenegro argumentó que la razón de fondo es política, pues ella ha criticado al gobierno del mandatario.
Paravicini, principal autoridad en el rubro de telecomunicaciones, aseguró a la radio privada Erbol que antes de la intervención “se han seguido todos los procedimientos legales y se han realizado las mediciones (de transmisiones televisivas) por tres veces”.
La ATT es una entidad que regula las actividades del sector y el máximo ejecutivo de la entidad es elegido por el presidente Evo Morales.