España no pedirá al fondo de rescate europeo “que compre deuda”, aseguró el secretario general del Tesoro español, Íñigo Fernández de Mesa, en una entrevista publicada este lunes por el diario económico Expansión.

“No está en la agenda que España pida ayuda al fondo, que compre deuda, ni mucho menos”, afirmó. “Esto no se ha producido y le puedo asegurar que no se va a producir”, agregó.

La Comisión Europea no recibió ninguna “solicitud de un Estado miembro” para que el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) compre deuda, afirmó por su parte el lunes en Bruselas uno de sus portavoces, Antoine Colombani.

El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, había afirmado el domingo en una entrevista al diario francés Le Figaro que la Eurozona está dispuesta a activar por primera vez el FEEF para permitirle comprar deuda soberana en los mercados.

La zona euro actuaría de acuerdo con el Banco Central Europeo (BCE), precisó.

Pero para activar este mecanismo, España debería presentar una petición, a lo que Madrid se ha negado hasta ahora temiendo que su economía sea puesta bajo tutela con nuevas condiciones en materia de reformas macroeconómicas.

También precisaría un análisis de la situación por el BCE.

El presidente de esta institución, Mario Draghi, había asegurado por su parte la semana pasada que la institución hará “todo lo necesario para preservar el euro”. “Y créanme, será suficiente”, subrayó.

A mediados de marzo el BCE congeló su programa de compra de obligaciones, iniciado en 2010 y después extendido el pasado verano boreal, para contener la subida de las tasas de interés en España e Italia.

Gracias a estas declaraciones, las vivas tensiones a las que España estaba sometida en los mercado de deuda se relajaron.

Tras haber alcanzado niveles récord, a más de 7,5%, los tipos de interés del bono español a diez años bajaron pese a permanecer cerca del 7%, un nivel considerado insostenible a medio plazo.

“El 7% es un interés que no se corresponde con los fundamentales de la economía española. Y, por tanto, debería corregirse, y no muy tarde”, afirmó Fernández de Mesa.

España, que ya cubrió el 68% de su programa de financiación para 2012, se enfrentará el jueves a una emisión de obligación considerada como un test que contará, entre otros plazos, con bonos a diez años.