Sucedió el miércoles 4 de julio, frente a una estación de gasolina en el poblado ruso de Oremburgo.

Un bus con 30 pasajeros a bordo transitaba por una carretera cuando, repentinamente, un camión Kamaz dio un giro imprudente, obligando al conductor del bus a girar a la derecha para evitar una colisión, informó Digital Journal.

Pese a ello, ambos vehículos impactaron, chocando contra una de las bombas en la estación de servicio. Su movimiento no se detuvo hasta que el camión golpeó una Van, mientras el bus se estrelló contra una Ford Mondeo, que a su vez chocó un Toyota Corolla.

En medio de este caos, un hombre que esperaba su turno para llenar de combustible su automóvil logró retirarse justo a tiempo del avance de los vehículos pesados, los que se detuvieron -literalmente- a sólo centímetros de él.

Por fortuna y pese a lo espectacular del accidente, sólo una anciana, pasajera del autobús, resultó con heridas menores.

La policía buscó al afortunado hombre para interrogarlo durante la investigación del accidente, sin embargo hasta el momento no han podido dar con su identidad.

http://youtu.be/MKBOWyiAhro