El nuevo ministro de Economía y Finanzas italiano, Vittorio Grilli, estima que las ventas de activos públicos para reducir la colosal deuda del país aportarán entre 15.000 y 20.000 millones anuales, en una entrevista al Corriere della Sera.

El gobierno quiere “garantizar, gracias a un programa plurianual, ventas de bienes públicos por 15 a 20.000 millones por año, es decir el 1% del PIB”, precisa Grilli.

Según este último, esto podría permitir reducir la deuda un 20% en cinco años.

Hoy, la deuda de Italia, en un 40% en manos extranjeras, según él, ronda los 2 billones de euros, o sea el 123% del PIB.

“Me alegraría reducirla a 100%, sería magnífico. Desgraciadamente, digamos la verdad, ya no hay activos vendibles del Estado y las empresas públicas como hace 20 años. Existe un patrimonio inmobiliario difícil de valorar”, reconoció.

El ministro se refirió asimismo a la bajada de la nota de Italia por Moody’s, afirmando que las relaciones con las agencias de calificación financiera “se han complicado”.

“Antes de la crisis de las subprimes, daban la mejor nota, la triple A a verdaderos peligros públicos”. “Desde el estallido de la burbuja, las agencias de rating, que son compañías privadas en conflicto de intereses potencial con sus clientes, expuestos a una cultura exclusivamente estadounidense, van siempre con retraso. Amplían los efectos de fenómenos en vez de anticiparlos”, acusa.

Según Grilli, “los mercados no reconocen todavía la calidad de los esfuerzos realizados por nuestro país para poner orden en las cuentas, el equilibrio presupuestario está al alcance de la mano, las reformas estructurales se han lanzado”.

“Ningún otro país hizo tanto en tan poco tiempo”, asegura, aunque teme la reacción de los mercados el mes que viene. “Agosto siempre es un mes difícil porque los mercados son más ligeros y volátiles”.

Por el contrario, es optimista en lo referente a la lucha contra la evasión fiscal, por estimar que permitirá al país cobrar “más de los 10.000 millones previstos” ya que la agencia encargada de recaudar impuestos dispone de “nuevos instrumentos” que permitieron por ejemplo identificar “dos millones de bienes inmobiliarios fantasmas no registrados”.