Con el objetivo de rescatar y difundir la cultura mapuche, familias de San Pedro, Chiguayante, Hualqui y en mayor cantidad de Hualpén, esperan con ancias que finalice la construcción de sus viviendas en el Conjunto Habitacional Santa Josefina II ubicado en la comuna de Hualqui.

Pero un retraso de tres meses, fisuras en gran parte de las casas, dimensiones menores a las permitidas por la ley y lana de vidrio de 40 milímetros en los cielos, a pesar de que las especificaciones técnicas dicen que no pueden ser menores a 100 milímetros, han hecho perder la paciencia en estas 98 familias que esperan hace 4 años que se concrete el proyecto que nació desde las Asociaciones Indígenas de la región.

Adrián Soto Lepillán, presidente del Comité Mapuche Leftraro, cuestionó duramente que, a su juicio, se desaprovechen los 1500 millones de pesos que cuesta el proyecto.

Es por esto que, cansados de reuniones con el Serviu, los afectados detuvieron las obras por horas, hasta que llegó personal del organismo con el fin de agendar una reunión para el próximo martes con el director.

Los vecinos acusaron que la constructora les presentó, a modo de ejemplo, una casa terminada, mientras que las que les entregarían no cuentan con cubrepiso ni estarían pintadas. Y esto, a pesar de que los propios vecinos consiguieron con la Subdere 396 millones de pesos para efectuar esos trabajos.

Los afectados dijeron que su solicitud consiste principalmente en que el Serviu fiscalice las obras y así la millonaria inversión, la única con estas características, sea bien utilizada. Junto a ello, señalaron que de obtener nuevamente una respuesta negativa, endurecerán las medidas de presión.