Un grupo de alumnos de Universidad Técnica Federico Santa María crearon un sistema de baterías para automóviles que no dañan el medio ambiente.
El proyecto “Trihidrisol” no solamente sería funcional para el sistema vehicular, sino también para las áreas doméstica e industrial.
La iniciativa, según informó el plantel, nació el año pasado a manos de Sebastián Sanhueza, Camilo González y Andrés Pizarro, teniendo una muy buena participación en la Feria Tecnológica Expotec.
“El sistema de baterías en su mayoría vehiculares, son altamente contaminantes para el medio ambiente tanto en uso como en desuso. Sebastián Sanhueza se contactó conmigo para colaborar en el desarrollo de su prototipo, el cual a la larga se ha convertido en la base para el desarrollo de investigación aplicada de una idea que ayude al medio ambiente y a la sociedad”, afirmó Camilo González.
Sobre este novedoso proyecto, explicó que “Trihidrosol sirve para reemplazar el sistema de baterías vehiculares, ya que los componentes como el ácido sulfúrico, plomo, polipropileno son de alto impacto ambiental, pues no son reciclables. Es entonces que en el camino nos vimos sumergidos en una responsabilidad tan grande de sacar el proyecto, que salieron nuevas ideas y asociaciones, que nos permitieron mejorar la idea principal, así nos dimos cuenta que no solamente sería funcional para el sistema vehicular, sino que para el área domestica y también el industrial”.
Camilo González relató que Trihidrisol funciona “básicamente es por medio de la energía solar, la que se convierte en electricidad. Dentro de un hidrolizador se separa la molécula de agua en hidrógeno y oxígeno, luego esto se almacena en debidos estanques señalando el gasómetro como prototipo, el que luego crea, como una primera opción una hidrolisis inversa en una pila de combustible, juntando el hidrógeno y el oxígeno, dando como resultado electricidad”.
Asimismo dijo que “como segunda opción y hasta el momento mucho más factible, se genera combustión por medio del hidrógeno. Explicado su funcionamiento, nos encontramos con tres funcionalidades: dividir compuesto líquido, almacenar y por último generar una energía motriz, todo esto de la forma menos contaminante posible”.
Luego de su participación en Expotec 2011, donde contaron con el apoyo del Grupo Universitario de Innovación e Investigación, GU2i de la Sede Viña del Mar, así como también del Centro para la Creatividad e Innovación de la Casa de Estudios, los estudiantes se dedicaron para presentarlo en diversas empresas, siendo una de ellas Codelco. “Me dediqué a reforzar lazos de trabajo, lo que ha resultado bastante bien también, pues pretendo acercar a la Sede a una agrupación de Casa Central bastante conocida que es GEA (Generación de Energías Alternativas), lo cual me ha servido para encontrar un equipo multidisciplinario más grande”, concluyó Camilo.
