La ciudad de Múnich acoge este sábado, con el duelo entre el local Bayern y el Chelsea inglés, la final del máximo torneo europeo de fútbol por cuarta vez en su historia, aunque será la primera que lo haga en el estadio Allianz Arena, construido en 2006.

Las tres anteriores finales de la Copa de Europa/Liga de Campeones (1979, 1993, 1997) tuvieron lugar en el estadio Olímpico, el recinto central de los Juegos de 1972 y que después pasó a ser utilizado por los dos clubes principales de la ciudad, Bayern y Múnich 1860, hasta que se mudaron al Allianz Arena.

La primera final tuvo lugar en la temporada 1978-1979, siete años después de la cita olímpica en la capital bávara, y la victoria fue para el Nottingham Forest inglés, que superó por 1-0 al Malmö sueco, con un tanto de Trevor Francis.

Múnich tuvo que esperar 24 años para volver a acoger, de nuevo en el Olímpico, una final de la máxima competición continental de clubes y lo hizo en 1993, cuando el Marsella se impuso también por 1-0 al Milan, con gol de Basile Boli, que permitió el único título francés en esta competición.

Cuatro años más tarde, en 1997, el ganador fue un equipo alemán, el Borussia Dortmund, que venció 3-1 a la Juventus de Turín italiana, en un partido donde el héroe de la noche en el Olympiastadion fue Karl-Heinz Riedle, que firmó dos de los goles de su equipo para derribar a la ‘Vecchia Signora’.

Desde entonces, Múnich no ha albergado la final de la ‘Champions League’, algo a lo que el nuevo y ultramoderno estadio del norte de la ciudad pondrá fin el sábado.