Aparecía como el gran partido de la fecha,  ya que con una victoria la UC alcanzaba la punta y si la obtenía Old Boys se ratificaba como líder. Además, la estadística cuenta que son los que más títulos tienen. Pero no paso ni lo uno ni lo otro.

En una particular decisión, la visita se negó a jugar sobre césped sintético y al respecto la directiva del Old Grangonian Club aclaró: “La razón de la suspensión del partido por la octava fecha del Torneo de Apertura de ARUSA entre U. Católica (local) y Old Boys fue la no comunicación a tiempo por parte de U. Católica de que el partido se jugaría en una cancha con superficie sintética”.

Esta decisión se tomó, ya que los de Peñalolén, recibieron la confirmación de que el encuentro se disputaría en esa superficie sólo 48 horas antes, lo que impidió que tuvieran el tiempo necesario para entrenar y prepararse, con lo cual existen riesgos de lesiones graves para los jugadores no acostumbrados a ella.

“De esta manera, los asesores físicos y médicos de nuestro club, recomendaron que nuestros equipos no jueguen en esta cancha sintética. La decisión anterior fue tomada por la directiva de Old Boys con el objetivo de velar por la salud e integridad física de sus jugadores” concluye el comunicado.

Pero esta decisión no fue compartida por el resto de los involucrados, que además hablan de falta de voluntad. Para Cristián Said, gerente de Arusa, “los cruzados no quisieron llegar a un acuerdo, ya que ellos rechazaron el ofrecimiento de Old Boys de prestar su cancha”.

“El directorio tomará la decisión pertinente sobre si el duelo se jugará, si gana Católica u Old Boys, pero espero que se marque un precedente para que estas cosas no se repitan”, concluyó el funcionario.