El Ministerio Público investiga la presunta falsificación de certificados de escolaridad en la Escuela de Conductores vinculada a las irregularidades de la Municipalidad de Hualpén.

Una de las investigaciones separadas que lleva adelante la fiscalía a propósito de los presuntos delitos de corrupción pública que rodean al ex alcalde Marcelo Rivera, se relaciona con la escuela de conductores “Acuarius” ubicada en calle Colón 8698.

La citada entidad falsificaría certificados de escolaridad, con aprobación de octavo básico y cuarto medio, para quienes no contaban con esos estudios mínimos exigibles para obtener licencia de conducir.

De hecho, dentro de las diligencias realizadas en su minuto por la PDI en esa escuela de conducción fueron incautados timbres falsos de la dirección de educación municipal de Penco, con los cuales se elaboraron los documentos fraudulentos, como asimismo de otras entidad, incluyendo a un instituto de capacitación de Arica.

La Dirección de Tránsito, a cargo de Jorge Escobar, estaría al tanto de la situación, a tal punto que desde la propia unidad municipal se derivaba a los interesados la escuela de conducción.

El concejal Gabriel Torres fue una de las personas que entregó algunos antecedentes.

El funcionario que fue denunciado como quien vendía las licencias, a cambio 200 mil pesos, sin tomar examen alguno, fue trasladado desde la dirección de tránsito a la secretaría municipal.

En la cuenta pública del alcalde Rivera, el 2010, se informó de 37 mil licencias entregadas, es decir, 130 diarias -ya que no se consideran feriados ni fines de semana-, con examenes incluidos, algo virtualmente imposible, por la falta de capacidad técnica y de personal del municipio.