Los ministros de Defensa, Alberto Otárola, y del Interior, Daniel Lozada, renunciaron este jueves a sus cargos en medio de duras críticas a la estrategia gubernamental contra la guerrilla y el narcotráfico, dos días antes de que el Congreso peruano vote una censura en contra de ambos.

“En la fecha, los ministros de Defensa y del Interior, han presentado sus renuncias irrevocables a sus respectivas carteras”, señaló en un comunicado la Presidencia del Consejo de ministros.

Las renuncias se producen cuando el presidente Ollanta Humala se encuentra de visita oficial en Seúl como parte de una gira asiática que incluyó a Japón.

Ambas dimisiones fueron entregadas a la vicepresidenta Marisol Espinoza en Palacio de Gobierno, quien encabeza el Ejecutivo ante la ausencia de Humala.

Otárola y Lozada estaban en el ojo de la tormenta y su permanencia en el gabinete había desatado severas críticas en medios políticos, de prensa e incluso en las redes sociales por su controvertida conducción de la estrategia contra la guerrilla y el narcotráfico, que costó la vida a 10 efectivos de las fuerzas de seguridad en las últimas cuatro semanas en zonas cocaleras del Perú.

La renuncia desactiva automáticamente el pedido de censura presentado por la oposición, que el Congreso iba a debatir el sábado con altas posibilidades de ser aprobada, lo que hubiera desencadenado una crisis política mayor.

El debate sobre la censura había polarizado al país y proyectó la imagen de un gobierno débil de Humala -un ex militar que luchó contra la guerrilla hace dos décadas- por supuestamente carecer de una estrategia de seguridad para combatir a la guerrilla y el narcotráfico.

Menos de dos horas antes de anunciarse las renuncias, el presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés, había señalado que “apoya plenamente a los ministros del Interior, Daniel Lozada, y Defensa, Alberto Otárola”.

Valdés expresó, además, que como jefe de gabinete no tiene la intención de renunciar, aunque dijo que si el presidente Humala se lo pide dejará el gabinete.

El gobierno admitió errores en las acciones contra la subversión por parte de la policía y los militares en las recientes operaciones contra el “narcoterrorismo en La Convención y el Valle Río Apurímac Ene (sudeste)”, según Valdés.

“Han sido en el campo operativo, errores dados por conductas y actuación de personas”, dijo el primer ministro a América TV, en un intento de bajar el nivel de las críticas de todas las bancadas opositoras a los ministros.

De su lado, la bancada oficialista del partido Nacionalista señaló que la censura sólo enviará un mensaje de debilidad y fortalecerá a los remanentes del grupo armado Sendero Luminoso, autor de los ataques contra las fuerzas de seguridad.

Las críticas subieron de tono luego que a principios de mayo un policía que llevaba desaparecido 20 días en medio de combates contra Sendero Luminoso fue hallado muerto por su padre, lo que disparó la indignación ciudadana contra el gobierno de Humala, cuya popularidad está por encima del 55% según los sondeos.