Al menos 16 personas, cinco policías, murieron este viernes en la explosión de una bomba por un kamikaze en un puesto de control policial en el noroeste de Pakistán, bastión talibán y principal santuario en el mundo de Al Qaida, según un nuevo balance oficial.

El atentado, contra un puesto de control de carretera de la policía tribal, se produjo en Khar, principal localidad del distrito tribal de Bajaur, cerca de la frontera con Afganistán, precisaron altos responsables de la administración local.

“El balance es de 16 muertos, entre ellos cinco miembros de la policía tribal”, dijo a la AFP Abdul Haseeb, un jerarca de la administración del distrito.

El kamikaze hizo estallar los explosivos que llevaba en un chaleco cuando llegó caminando al puesto de control, indico Tariq Khan, otro funcionario.

El atentado no fue reivindicado por el momento, pero el distrito de Bajaur es uno de los bastiones del Movimiento de Talibanes de Pakistán (TTP), principal grupo insurgente islamista paquistaní.