La Fiscalía Nacional reconoció que existen problemas presupuestarios para poder traer a Chile más de quinientos autos robados, los que se encuentran actualmente en Bolivia.

Se estima que son 555 los vehículos robados en Chile que están en diversas ciudades del país vecina, tras ser sacados de suelo nacional por organizaciones criminales.

El Ministerio Público junto a la Cancillería realizaron una serie de gestiones internacionales para lograr su devolución. No obstante, su traslado costaría cerca de 200 millones de pesos.

Ante esta situación, el fiscal nacional, Sabas Chahuán, indicó que carecen de recursos para ejecutar la diligencia.

En tanto, el fiscal general de Bolivia, Mario Uribe, calificó como preocupante la situación de la comercialización de autos chilenos robados que son comercializados en su país.

La autoridad de La Paz aclaró que existe una orden para que se identifiquen las máquinas de origen ilícito.

Uribe señaló que no existen plazos para concretar la devolución de los vehículos, pese a que en un principio se estableció este mes para realizar la operación.