Cinco policías resultaron heridos este martes en una jornada de protestas en La Paz, citadas por separado por una central de trabajadores en demanda de mejores salarios y médicos de la red pública, en huelga desde hace dos semanas contra el aumento horario de su jornada laboral.
El ministro de Interior, Carlos Romero, dijo en conferencia de prensa que los uniformados fueron heridos cuando mineros estatales les lanzaron guías de dinamita, durante una manifestación en la Plaza de Armas, sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
“Estas dinamitas fueron lanzadas a quemarropa contra las policías, producto de eso tenemos cinco policías heridos”, afirmó Romero.
El viceministro de Interior, Jorge Pérez, declaró por su lado a periodistas que “no podemos tolerar agresiones de este tipo con policías heridos con esquirlas de dinamita” y anunció que los autores de los ataques serán remitidos a la justicia.
Los trabajadores, principalmente mineros y fabriles, recorrieron a pie varias calles y avenidas de La Paz haciendo tronar sus guías de dinamita, causando alarma entre la población.
La protesta forma parte de la huelga de 48 horas convocada por la Central Obrera Boliviana (COB) en demanda de un salario mínimo nacional capaz de sostener una canasta familiar, equivalente a 1.150 dólares mensuales.
En otro lugar de La Paz, la policía reprimió con carros lanzagua y gases lacrimógenos a estudiantes que manifestaban ante la sede del Ministerio de Salud, que se niega a anular un decreto que amplía la jornada laboral de los médicos del sistema de salud pública de seis a ocho horas.
Un número no precisado de estudiantes fue detenido en esa manifestación.
Los disturbios habían cesado pasado el mediodía, aunque los médicos mantienen una huelga indefinida que implica el cierre de hospitales públicos.
Algunas clínicas privadas cerraron también sus puertas este martes en una nueva escalada del conflicto. que el gobierno “no puede tolerar y sancionará hasta con el cierre definitivo” de esos nosocomios, según advirtió el ministro de Salud, Juan Carlos Calvimontes.
