Los trabajadores que bloqueaban desde el jueves el acceso al Puerto de Buenos Aires en defensa de fuentes de trabajo por el freno a las importaciones impuesto por el gobierno nacional, resolvieron levantar este sábado la protesta, informó un vocero de los manifestantes.

“Se pasó a un cuarto intermedio”, dijo Raúl Vázquez a radio Diez, portavoz del grupo que incluye a camioneros, despachantes de Aduana y obreros del puerto, todos ellos empleados a jornal no sindicalizados, afectados por la política de restricción de importaciones del gobierno nacional.

Pese a la medida y mientras duró la protesta, la actividad portuaria en el interior de la terminal se desarrolló en forma normal, según habían informado a la AFP fuentes gremiales y oficiales.

El Puerto de Buenos Aires concentra casi el 70% del movimiento de contenedores del país y es el quinto en el ranking regional por volúmenes de carga, según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL).

La protesta estuvo limitada al puerto de la capital argentina, sin afectar a otras terminales como las de Rosario y alrededores (300 km al norte) en el mayor polo agroindustrial y exportador de cereales.

Las trabas a las importaciones fueron impuestas por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner luego de que la balanza comercial cerrara 2011 con un superávit de 10.347 millones de dólares, una caída de 11% con respecto a 2010.

Esta política motivó quejas de Estados Unidos contra Argentina ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) con apoyo de la Unión Europea, Australia, Israel, Japón, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Noruega, Panamá, Suiza, Taiwán, Tailandia y Turquía, entre otros.