La causa exacta de la muerte de Piermario Morosini, el jugador del Livorno (2ª división) que falleció el sábado tras un paro cardiaco en un partido contra el Pescara, sigue siendo indeterminada tras la autopsia llevada a cabo este lunes, indicaron fuentes médicas.

“No hay ningún indicio visible que permita determinar qué provocó la muerte de este hombre”, declaró el doctor Cristian D’Ovidio que llevó a cabo la autopsia durante seis horas.

“Tendremos que realizar pruebas más profundas, incluyendo una prueba toxicológica”, añadió.

El centrocampista del Livorno, de 25 años, murió tras sufrir un ataque cardiaco en un partido de segunda división que su equipo jugaba en Pescara. Los servicios de socorro intentaron reanimarle con un desfibrilador pero Morosini falleció cuando lo estaban trasladando al hospital de Pescara.