La deuda de los bancos españoles con el Banco Central Europeo (BCE) alcanzó en marzo un nuevo récord histórico situándose en 227.600 millones de euros, impulsada por la reciente inyección de liquidez del BCE, informó este viernes el Banco de España.

Estas cifras, que también revelan la capacidad o no de los bancos españoles de financiarse en los mercados (en lugar de recurrir al BCE), ya se había elevado en febrero a 152.432 millones de euros, según el Banco de España, que publica estos datos desde 1999.

El recurso de los bancos españoles al BCE, que en julio de 2010 había llegado hasta los 131.900 millones de euros, luego había bajado, llegando hasta los 42.227 millones de euros en abril de 2011.

Sin embargo, desde septiembre volvió al alza y entre febrero y marzo llegó a subir un 49%.

El aumento fue impulsado por la inyección de liquidez del BCE, que en diciembre y febrero concretó dos préstamos a tres años, con tasas de interés ventajosas, a los bancos de la Eurozona. El primero fue para más de 500 bancos por un total de 489.000 millones de euros, el segundo para 800 bancos por valor de 530.000 millones de euros.

Esta inyección de liquidez apuntaba a ayudar a los bancos, que tenían dificultades para financiarse en los mercados, en un clima general de desconfianza.

El sector bancario español es particularmente criticado por su dependencia del mercado inmobiliario, desmoronado en el país desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008.

En el marco de una nueva reforma, el gobierno exigió recientemente que los bancos efectúen de aquí a un año (dos en caso de fusión) provisiones y una reserva de capital de 50.000 millones de euros, una suma que les permitiría hacer frente a la posible pérdida de valor de sus patrimonios inmobiliarios.