El presidente francés, Nicolas Sarkozy, candidato a un segundo mandato, declaró que quiere que “los gigantes de la red” Internet paguen impuestos en Francia, evocando en particular un gravamen a la publicidad.
“Los gigantes de la red deberán también, además de su contribución al financiamiento de la creación y de las redes, pagar un impuesto representativo de sus actividades en nuestro país”, declaró Sarkozy en una entrevista al semanario Le Point.
“No es admisible que tengan facturaciones de varios miles de millones de euros en Francia sin contribuir al impuesto”, dijo.
“Hay al menos dos pistas serias que quiero explorar de forma paralela, a nivel francés y europeo: un gravamen a la publicidad en línea y el sometimiento al impuesto de las sociedades”, agregó.
En junio de 2011, el Parlamento francés renuncio a un impuesto a la compra de espacios publicitarios en línea, llamado “impuesto Google”, que hubiese debido aplicarse en julio de 2011.
El objetivo de ese impuesto era una parte de los ingresos de los gigantes de Internet establecidos fiscalmente en el extranjero, pero el gobierno de Sarkozy se opuso al mismo argumentando que afectaba a las PME francesas que deseaban lanzarse a la red y no a las grandes firmas.
La oficina francesa de Google reaccionó a las declaraciones del presidente-candidato estimando que las políticas estatales tendrían que “alentar en vez de trabar el potencial de crecimiento” que aporta Internet.
“Internet aporta una formidable oportunidad de crecimiento económico y de empleo en Francia”, afirmó un portavoz de la firma en un comunicado.