La Policía de Ecuador detuvo a 10 sospechosos de haber activado bombas panfletarias contra una visita del presidente colombiano Juan Manuel Santos en diciembre pasado, y que estarían planeando actos violentos con motivo de una marcha opositora, informó el domingo el gobierno.

Los arrestos se produjeron la noche del sábado en Quito, dijo el ministro del Interior, José Serrano, quien indicó que los capturados fueron sorprendidos en flagrancia “planificando actos de violencia a partir del 8 de marzo”.

Ese día está previsto el inicio de una marcha indígena y de grupos opositores que, según se ha sido anunciado, concluirá con una concentración en Quito el 22 de este mes.

Los detenidos fueron presentados este domingo ante un juez, quien ordenó prisión preventiva para nueve de ellos, señaló el ministro en rueda de prensa.

Agregó que los aprehendidos al parecer son responsables de la explosión de tres bombas panfletarias en Quito, Guayaquil (suroeste) y Cuenca (sur) contra la visita que realizó el mandatario colombiano a Ecuador el 19 de diciembre.

Según Serrano, los sospechosos pertenecen a una organización de extrema izquierda autodenominada Grupo de Combatientes Populares.

“Lo fundamental es que se logra desarticular una célula importante de un grupo que estaba planificando actos contra nuestra democracia. No se descarta dentro de la investigación determinar algún tipo de vinculación con otras organizaciones”, declaró el funcionario.

“Hay mensajes de celular que claramente determinan que la intención es tomarse el poder por las armas”, añadió.

El sábado, el presidente socialista Rafael Correa llamó a sus seguidores a “resistir pacíficamente” la marcha opositora, que denuncia como un intento para desestabilizarlo, y advirtió sobre actos violentos que se estarían preparando para crear caos durante las movilizaciones.