Un reciente estudio realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de Penn State, asegura que las personas con enfermedades cardiacas son más propensas a sufrir un infarto o complicaciones similares cuando se encuentran realizando algún tipo de trabajo en climas fríos.

Según describe Eurekalert los enfermos del corazón no son capaces de compensar la alta demanda de oxígeno que presenta el cuerpo al inhalar aire frío.

Según señala el director del Instituto del Corazón del Colegio de Medicina de la Universidad de Penn State, cuando una persona realiza un ejercicio en condiciones de muy baja temperatura, puede provocar una distribuciòn desigual del aire en las vías coronarias. Ese problema es corregido por los cuerpos sanos y el corazón continúa bombeando correctamente la sangre. Sin embargo, enfermedades como la de la arteria coronaria, impedirían el normal funcionamiento del órgano vital.