Una vez más y en cuarta instancia esperando el veredicto de la justicia para salir en libertad, la familia de Marcelo Rivera se mantuvo atenta al dictamen de los magistrados, sin resultados positivos para su defensa, que recibió un rotundo rechazo a la apelación expuesta, imposibilitando revocar la medida cautelar.
El 27 de enero pasado por primera vez el alcalde de Hualpén pisaba el tribunal para ser formalizado, audiencia que posteriormente lo condujo a la cárcel El Manzano. Luego su defensa intentó en el juzgado de Talcahuano y la Corte, considerar la modificación de la cautelar por arresto domiciliario total o parcial, finalmente sin éxito.
La argumentación esta vez tuvo relación con la existencia de un brote de virus Hanta registrado en el centro penitenciario Bío-Bío, cárcel consesionada que se sitúa al costado del penal El Manzano, donde no existen contagiados.
Réplica en que el fiscal a cargo de la investigación José Patricio Aravena, hizo hincapié.
La esposa de Rivera, una de sus hermanas y Miguel su hijo concejal de Hualpén, también imputado en la investigación por el delito de cohecho, lamentaron la determinación judicial, destacando que no están cansados ni lo estarán para seguir defendiendo la inocencia de su padre.
Con un plazo de investigación de tres meses, desde fines de enero pasado, la indagatoria sigue con su curso normal, tal como lo comentó el fiscal a la espera también de diligencias que pudiera pedir la defensa de Rivera, a cargo del abogado Marcelo Villena.