Cuando en gran parte del país se pueden sentir temperaturas superiores a los treinta grados centígrados, las tradicionales cazuelas, charquicán, los queridos porotos, o los churrascos ya no resultan tan apetecibles, al menos durante el día.

Por otro lado las ensaladas a gran parte de nosotros tampoco satisfacen mucho. Teniendo presente esto aquí hacemos un recorrido por algunas comidas que pueden ayudar a los que desean disfrutar de la buena mesa a pesar del calor existente.

Lo primero que hay que tener presente es que la actividad física durante el verano disminuye debido a que el calor evita mantener una temperatura corporal adecuada. Por ello el consumo de agua debe aumentar, en lo ideal a los dos litros diarios. Una buena alternativa son los jugos de fruta natural, granizados y batidos, los cuales entregan una gran cantidad de agua, vitaminas, minerales, hidratos de carbono y otras sustancias no nutritivas pero de importantes beneficios para la salud, conocidas como antioxidantes naturales, que se encuentran mayoritariamente en los alimentos vegetales.

Ahora si te gustan las pastas una buena idea es servirlas frías, como ensaladas, más aún si vas a realizar actividad física ya que son una buena fuente de carbohidratos, los cuales proporcionan energía en el caso que quieras hacer actividad física durante este verano.

Otra opción muy recomendable son las sopas frías como el gazpacho, también llamada sopa andaluza, la que puede llevar tomates, pimientos , ajos y el pepino previamente pelado. Se añade el aceite, el vinagre y la sal y se bate bien con una batidora. Una vez batido se pasa por un colador para quitar las pieles y las pepitas del tomate y el pimiento. Si lo encuentras muy espeso, puedes añadirle agua, hasta darle la textura que mas te guste. Se rectifica de sal y se mete en el refrigerador en un recipiente tapado.

Si eres fanático de la carne pero no quieres nada con el calor, y deseas probar algo diferente al jamón y esas cosas, quizás te podrías atrever a probar las llamadas ensaladas de carne. Estas se pueden hacer con casi todo tipo de carne y se puede mezclar con diferentes verduras. Si gustas de intentarlo busca algunas recetas en la web.

También es preferible consumir carnes magras como lo son el pescado y pollo. Para reducir el riesgo de aumento del colesterol, hipertensión y enfermedades cardiovasculares, que pueden aparecer en esta fecha debido al esfuerzo físico extra que exige desenvolverse bajo temperaturas más altas.

Por último aprovechar las frutas de la estación tales como el melón y la sandía, la cual posee una gran cantidad de agua. La sandía es una de las frutas que contiene mayor cantidad de agua (93%), por lo que su valor calórico es muy bajo, sólo 20 calorías por 100 gramos. Quizás los niveles de vitaminas y sales minerales son poco relevantes en la sandía. Pero en ella abunda el potasio y el magnesio, aunque en cantidades inferiores si se compara con otras frutas. Sin embarga el color de su pulpa se debe a la presencia del pigmento licopeno, sustancia con capacidad antioxidante.

Además se suele sugerir que se prefieran alimentos donde esté presente la vitamina A, la cual ayuda a la renovación de la piel. Esta abunda en las verduras de hoja verde y de coloración rojo anaranjado amarillento, como lo son la zanahoria y el tomate

Sin duda estos son solo algunas ideas que pueden ayudar un poco en lo que a veces resulta un poco difícil de elegir durante el verano como es la comida.