Las autoridades sanitarias estadounidenses (FDA) informaron de “violaciones graves” en el proceso de fabricación de las prótesis mamarias PIP rellenas de solución salina de la firma francesa en 2000, según una carta enviada al fundador de la empresa.
Las prótesis Poly Implant Protheses (PIP) están en el centro de un escándalo que involucra a otros tipos de implantes mamarios rellenos de gel de silicona.
La FDA había enviado del 11 a 17 mayo 2000 a uno de sus investigadores a la planta de IPP, ubicada en La Seyne-Sur-Mer, al sur de Francia, para inspeccionar el proceso de producción de prótésis.
En la misión se detectó que los implantes mamarios fueron “adulterados”, dijo la carta de la FDA a la cual la AFP tuvo acceso el martes. Se cita en ella once “violaciones de los métodos utilizados, locales e instalaciones que no se ajustan a las prácticas de producción de referencia.”
De estas violaciones, la FDA cita “la incapacidad para establecer y mantener procedimientos para la verificación” del cumplimiento de los objetivos de calidad de las prótesis.
El inspector de la FDA también reprochó a la PIP no haber informado a la agencia estadounidense, como lo requiere la ley, la existencia de cientos de denuncias en Francia sobre estas prótesis entre enero de 1997 y 2000, y de por lo menos en otros veinte países en el mismo período.
Unas 30.000 mujeres en Francia se sometieron a implantes de prótesis mamarias de la marca PIP, una empresa que, hasta su quiebra a inicios de 2010, exportó ese producto a más de 60 países.
Buena parte de la producción fue exportada a países de América Latina (especialmente Venezuela, Brasil, Colombia y Argentina): el 58% de las ventas en 2007 y el 50% en 2009.