La creatividad y tecnología japonesa parecen no tener fin, y es que, cansados de las estruendosas alarmas para vehículos que existen hoy en día, crearon un novedoso sistema personalizado en que el trasero humano es el elemento perfecto para prevenir el hurto de sus móviles.
La novedad, que está siendo desarrollada en el Instituto Avanzado de Tecnología Industrial de Tokyo, se basa en un sistema de 360 sensores de presión posicionados en el asiento del conductor, que captan entre otros indicadores, el peso de la persona y su posición al sentarse, lo que según sus desarrolladores arroja un 98% de éxito a la hora del registro del trasero del dueño del móvil. Algo así como un detector de huellas digitales, pero con otra parte de la anatomía humana.
El revolucionario sistema además de ser totalmente personalizado, dicen sus creadores, se espera que sea utilizado por las compañías fabricantes de vehículos en todo el mundo. También se está trabajando en la incorporación de alguna señal sonora que complemente la seguridad del móvil.