Valérie Pécresse, vocera de Gobierno de Francia, dijo que evalúan solicitar a las portadoras de prótesis mamarias de la marca Poly Implant Prothese (PIP) que se las retiren, por los riesgos que traen consigo.
Esto lo confirmaron a la cadena “LCI”, luego que el diario “Libération” publicara que las autoridades sanitarias han decidido la medida de precaución, tras la muerte de una mujer que se sospecha falleció por culpa de éstas, que fueron catalogadas por la vocera como una amenaza para sus usuarias.
“Estamos en un proceso de evaluación de esas prótesis mamarias ante los riesgos de cáncer que aparecen”, dijo la representante del Ejecutivo, según la cual “el Gobierno anunciará de aquí a finales de semana su plan de acción”.
Lo que más urge al Gobierno Galo, según Pécresse, es un censo para establecer cuántas mujeres optaron por el modelo PIP.
La Ministra añadió que en caso de tratarse de una urgencia sanitaria y de salud pública, el costo de esa operación correría a cargo de Seguridad Social, es decir, la subsidiaría parcial o completamente el Gobierno.
Lo preocupante es que el diario “Libération” señaló que alrededor del mundo podría haber unas 300 mil mujeres con estos peligrosos implantes.
El peligro de los implantes radica en que se habrían fabricado con silicona industrial de uso no médico.
Cabe mencionar que si el Gobierno llegase a solicitar el retiro de los implantes de los pechos de al menos 30.000 francesas, constituiría un hito en la historia de la cirugía estética.
Según informa Emol, la Fiscalía de Marsella abrió una investigación contra la productora de implantes por lesiones y homicidio involuntario, luego de recibir más de 2.000 querellas en el 2010.