El alcalde de Tomé, Eduardo Aguilera, en los próximos días determinará si postula a las primarias concertacionistas de abril. Esto luego de acogerse a la ley antidíscolos, con su renuncia a la democracia cristiana. Ahora, como independiente, criticó a su antiguo partido.

A fines de octubre concluyó el plazo para que los candidatos a las municipales renunciaran a sus militancias partidarias de querer postularse y no concitar el respaldo de sus filas.

Entre otros casos, uno emblemático fue el del jefe comunal de Tomé, Eduardo Aguilera, que no obvtuvo la venía de su ex partido, la democracia cristiana, para postularlo a la reelección.

Aguilera, ahora como independiente, puede ir directo a las municipales de octubre del 2012, pero también tiene el escenario abierto para acogerse a las primarias de la Concertación, según el reglamento interno del proceso y la acogida desde distintos partidos que aceptan la candidatura de Aguilera.

El alcalde fue desestimado por la falange que otorgó el cupo a la militante Ivonne Rivas, y aún no se reconcilia con su antiguo partido. Asegura que con su renuncia también evitó ser cómplice de malas prácticas.

De ir a las primarias de la oposición en abril, medirá fuerzas con la misma Ivonne Rivas, y otros candidatos de distintos partidos de la concertación, eso sí que libre del peso de la falange, para bien o para mal.