A seis meses de la Eurocopa-2012 de Polonia y Ucrania, Inglaterra tendrá la vista puesta el jueves en la ciudad suiza de Nyon donde la UEFA tiene que confirmar o desestimar la sanción de tres partidos a Wayne Rooney, en una decisión que podría dejar al delantero fuera del torneo.

El jugador del Manchester United fue sancionado tras haber recibido una tarjeta roja por dar una patada a un jugador montenegrino en el último partido de la fase de clasificación, disputado el 7 de octubre en Podgorica (2-2).

Si se mantiene la sanción, Rooney se perdería toda la primera fase de la Eurocopa, es decir los partidos contra Francia el 11 de junio, contra Suecia el 15 y contra Ucrania el 19, todos en Ucrania.

Rooney no podría volver a jugar hasta un teórico cuarto de final, a condición de haber sido seleccionado. El técnico Fabio Capello, que estará en Nyon para defender al jugador, ya avisó de que esperaría a conocer la sanción para decidirse.

La federación inglesa de fútbol (FA) apeló la decisión y contrató a un gabinete de abogados externo para intentar salvar a su estrella, que viajará a Nyon el miércoles por la noche tras su partido con el Manchester United en el campo del Basilea, en la Liga de Campeones.

Para convencer a la Unión Europea de Fútbol (UEFA), Inglaterra argumenta que Rooney pidió disculpas rápidamente tras el partido, admitió haberse comportado mal y que además la patada fue inofensiva.

El jugador afectado, Miodrag Dzudovic, escribió incluso a la UEFA para pedir clemencia para el jugador.

Pero Rooney tiene en contra su pasado de “chico malo” del fútbol inglés.

En el Mundial-2006, en cuartos de final contra Portugal, fue excluido por pisar a Ricardo Carvalho y empujar a Cristiano Ronaldo, entonces compañero suyo en el Manchester United.

Con su club, Rooney ya tiene tres tarjetas rojas, que son muchas para un atacante de 26 años, y el año pasado profirió varios insultos ante las cámaras que le costaron una suspensión de dos partidos.

Por todo ello es poco probable sea totalmente absuelto por la UEFA, por lo que Inglaterra podría quedarse sin Rooney sólo un partido, pero uno muy importante, contra Francia.

Su ausencia sería un duro golpe para la selección inglesa, que no tiene a ninguna otra estrella de nivel internacional. El atacante de los “Red Devils” marcó 28 goles en 73 selecciones y es una pieza clave en la línea de ataque de su selección.

Fabio Capello ya se prepara para lo peor y excluyó a propósito a Rooney de los dos amistoso disputados el mes pasado en Wembley, contra España y contra Suecia, ambos ganados 1-0.