Los jugadores de la selección argentina de rugby, que el domingo se enfrentan en Palmerston North a Georgia en el Mundial, quisieron este martes rebajar la euforia tras victoria contra Escocia y recordaron que el pase a cuartos de final no está conseguido.

Los Pumas ganaron por 13-12 a Escocia el domingo pasado en Wellington, en el partido que parecía clave para hacerse con una de las dos plazas del Grupo B que dan acceso a cuartos de final, y ahora falta el último escollo ante Georgia para lograr el pase.

“La gente no toma conciencia de lo duro que es el partido del domingo contra Georgia”, afirmó este martes el octavo Juan Manuel Leguizamón.

“Viene un partido durísimo. Mucha gente dice que es un equipo en los papeles más débil que Escocia. La verdad es que físicamente impone un juego muy duro. Tiene jugadores muy fuertes”, afirmó el jugador del Lyon.

“Tenemos que estar muy preparados. Son jugadores que no se rinden en ningún momento. Son batalladores, fuertes, muy preparados. Debemos afrontar el partido con igual o más concentración que contra Escocia”, añadió Leguizamón.

Con este aviso a sus compañeros de que deben estar preparados para una batalla, sin querer tomar el papel de los capitanes del equipo, pese a ser uno de los veteranos, Leguizamón quiere que no haya euforia.

“Es mi séptimo año en los Pumas. Como líderes están Felipe (Contepomi), Rorro (Rodrigo Roncero), Mario (Ledesma), Pato (Albacete). Hay suficientes líderes y de gran envergadura para que se encarguen de esa misión”, señaló.

Por su parte, el segunda línea Manuel Carizza, en la misma línea de Leguizamón, señaló que los Pumas no deben confiarse ante Georgia, pese a que Argentina parte claramente como favorita.

“Si perdemos contra Georgia nos vamos a casa. Eso da una presión enorme. Es una responsabilidad, ya que debemos concretar todo lo que hemos estado trabajando”, señaló Carizza.

“Ellos van a venir con un juego de forwards cerrado, muy agresivo. El partido va a volver a pasar casi el 90% por los forwards y los tres cuartos serán los que decidan el resultado. Vamos a jugar igual que contra Rumania (en el segundo partido del Mundial), tratando de ser verticales y cuando se abran los espacios poder jugarlos”, añadió el segunda línea del Biarritz.

“Sabemos que son muy fuertes y que no tienen nada que perder. Van a dejar todo en la cancha, intentando dar la sorpresa, para ganar un partido en el Mundial”, señaló el forward argentino.

Carizza piensa que Georgia tiene ciertas características de los equipos latinos, pese a ser un país del Este de Europa.

“Son muy orgullosos, les gusta el duelo. Sacan de dentro cosas que quizá un equipo angolosajón no tiene, como ese amor por el contacto y por el uno contra uno”, explicó Carizza.