Puntualmente a las 21:00 horas de este sábado se presentó en el Movistar Arena de Santiago el astro puertorriqueño Ricky Martin, con un show cargado de erotismo y marcado por diversos mensajes contra la homofobia.

El artista abrió los fuegos pasando un video donde aparece soltando las ataduras de unas cadenas, buscando dar el mensaje de la libertad alcanzada tras sacar a la luz su homosexualidad.

Martin no se cansó de hacer alusión a la búsqueda de la paz interior y del amor hacia la humanidad y recalcó que buscaba igualdad de derechos para todos, sin importar condición sexual, raza o religión.

Fue así como dedicó momentos especiales a un integrante de su staff de bailarines que también reconoció su homosexualidad y de su guitarrista, de origen cubano y raza negra, David Cabrera, llamando a dejar atrás la suerte de ‘bullying’ en contra de estas personas.

Momentos

En lo netamente musical, Martin hizo un amplio recorrido por sus más grandes éxitos y emocionó a la multitud interpretando en versión acústica “Eres el amor de mi vida”, “Fuego contra Fuego” y “Te extraño, te olvido, te amo”, todos éxitos que lo catapultaron a la fama.

También fue el momento para recordar el clásico single de su primer álbum de solista y que volvía loca a la fanaticada cuando agitaba las caderas y movía su abundante melena al ritmo de ‘Dime que me quieres… en la intimidad, tú sabes que me puedes dominar…’

Además hubo espacio para oír su gran tema “María”; la balada romántica que le valió un Grammy “Vuelve”, el himno del mundial de fútbol de Francia ’98 “La Copa de la Vida”, y el pegajoso hit “Livin’ la vida loca”.

Ricky Martin también aprovechó para hacer gala de su máxima sensualidad interpretando el tema “I Am”, en medio de la representación de una orgía junto a sus bailarines.

En tanto, de su más reciente álbum, Martin interpretó “Será, será”, “Frío”, “Más” y “Lo mejor de mi vida eres tú”, acompañado de una banda musical con un nivel impecable que lo posiciona como un show de alta calidad a nivel internacional.

Asimismo también hubo tiempo para jugar con el público, gracias al tema “Por arriba, por abajo”, que puso en competencia el entusiasmo de la galería, la platea, la cancha y el sector VIP.

Martin se despidió aplaudiendo al público, enfundado en una bandera chilena y recalcando, una vez más, que “tú y yo somos iguales”.