Hasta la Intendencia del Bío-Bío llegó Chile Pesca, una organización que agrupa a 250 organismos de la pesca artesanal.

Están pidiendo a través de una carta al Intendente y también al Presidente de la República, que se patrocine una plataforma social en beneficio de los trabajadores del sector, de plantas y embarcaderos.

También solicitan que se mejore también las condiciones de los pescadores artesanales y se incorporen en las licitaciones de las cuotas de pesca
industrial.

Ellos dicen que sólo la familia Angelini es dueña de un 54% de las cuotas de jurel, anchoveta, sardina común y española, y merluza de cola, asfixiando de esta forma a las pymes que quieren competir.

Asimismo, señalan que el 67% de los pequeños y medianos empresarios del rubro en el Bío-Bío han desaparecido con estas medidas.