Hera Bío-Bío, la empresa dueña del polémico terreno de Curaco Alto, denunció la tala de 35 hectáreas del fundo, durante el proceso de litigio del predio con el marido de la ex Intendenta del Bío-Bío, Jacqueline Van Rysselberghe. La empresa, no descartaría iniciar acciones legales.

Hera Bío-Bío inscribió hace algunos días en el Conservador de Bienes Raíces, el Fundo Curaco Alto, del sector Rafael de Tomé, luego de meses de litigio, porque el marido de la ex Intendenta del Bío-Bío se lo adjudicó en un polémico remate.

El problema se originó cuando los representantes de la empresa llegaron al lugar para volver a tomar posesión del predio, encontrándose con la tala casi total de pinos y eucaliptus, e incluso de vegetación nativa. Hecho que se habría producido durante el período en que el marido de Van Rysselberghe tuvo la posesión del predio.

La explotación se habría realizado sin ningún tipo de permiso o plan de manejo de la Conaf, organismo que tiene la obligación de visar este tipo de trabajos. Esto, ya que la tala habría sido durante el tiempo en que el predio estuvo en litigio.

El departamento de comunicaciones de Hera Bío-Bío informó que la empresa está tomando conocimiento de los hechos denunciados, y no descarta iniciar acciones legales de confirmarse el ilícito.