Directivos de los establecimientos que recuperan clases en el marco del plan “Salvemos el Año Escolar” dicen estar concientes de que no se trata de una recuperación óptima. Mientras, el Colegio de Profesores criticó la aplicación de este programa insistiendo en la tesis de que se intenta “aplastar la movilización”.

El Colegio Marina de Chile desde el 29 de agosto está en clases en el marco del Plan Salvemos el Año en la escuela Ester Hunneus de Lorenzo Arenas, ahí está una parte del kinder y toda la enseñanza básica, mientras que en dependencias de la Universidad de Los Lagos se hace clases a los cuartos medios, preparándolos para la PSU.

Ahora comenzará la instrucción para los niveles de primero, segundo y tercero, con una fórmula semipresencial que implica la utilización de videoconferencia, un sistema nuevo que se implementa en la emergencia y que contempla sólo los ramos asociados a la Prueba de Selección Universitaria e Inglés.

El tema es que, además de los problemas de espacio, la pregunta es cuán eficaz resulta ser esta recuperación.

En esos números están también en el Colegio España, que realiza su trabajo en Aula en la Escuela República del Ecuador de Pedro de Valdivia. Recinto que desde que comenzó la movilización se le fueron alrededor de 100 estudiantes en traslado y que ahora otras 100 alumnas no están inscritas, el resto todas en clases, pero en constante evaluación.

Un proceso que para Figueroa se ha desarrollado de buena forma, aún cuando también se debieron ajustar y más bien reajustar los contenidos.

Para el Magisterio, el Plan salvemos el año busca solucionar las notas, o sea una cuestión administrativa, más que recuperar en el amplio sentido de la palabra.

En este contexto hay además una diferencia de interpretación de los reglamentos, porque mientras el Colegio de Profesores y los estudiantes insisten en que el término del año escolar es de resorte de la dirección y cuerpo docente de cada establecimientos cuando no se supere el mínimo de 85% de asistencia, pero por otro lado, en la Seremi de Educación apuntan a que en casos generales, como ahora, son de su competencia, en lo que será dirimido por Contraloría.

Cabe acotar, además, que 1.500 jóvenes inscritos en el programa salvemos el año aún esperan por un lugar para recuperar clases en Concepción.