Dos defensores de migrantes, el sacerdote Tomás González y el activista de Amnistía Internacional Rubén Figueroa, fueron retenidos de manera arbitraria por elementos del Ejército y policías en el estado mexicano de Tabasco (sureste), denunció el sábado la organización.
Los dos activistas “han sido retenidos arbitrariamente por elementos del Ejército y de la policía en Tenosique (Tabasco), no los dejan moverse de donde están”, dijo a la AFP vía telefónica un vocero de Amnistía Internacional.
Según un comunicado de la organización, el religioso y el activista están acompañados por dos migrantes, cuya nacionalidad no fue especificada, que también permanecen retenidos.
Los activistas, que viajaban en una camioneta, se detuvieron un momento para comprar, la tarde del sábado, algunas ropas para el albergue de migrantes de Tenosique cuando fueron abordados por militares, “pidiendo hacer una revisión porque parecían sospechosos”, señaló Amnistía.
“Los elementos del Ejército y policías de tránsito no los dejan moverse del sitio donde está la camioneta desde hace dos horas. Hay un vehículo del Ejército y patrullas”, explicó Axel García, de la organización defensora de migrantes Movilidad Humana, a la que pertenece el religioso González.
Días atrás, Amnistía Internacional en México lanzó una alerta pues temía por la seguridad de fray Tomás González, encargado del albergue para migrantes de Tenosique.
El religioso participó el sábado en el vecino estado de Chiapas (sureste) en la caravana que encabeza el poeta mexicano Javier Sicilia para exigir un alto a la violencia del narcotráfico y que el gobierno modifique su estategia militar antidrogas.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han alertado sobre la seguridad de activistas en México ante los frecuentes agresiones de parte del crimen organizado y de algunas autoridades.
