Un estudiante ecuatoriano de 17 años se encuentra en estado de coma tras resultar herido en choques con la Policía durante una protesta contra reformas a la educación secundaria, informaron sus familiares este viernes, mientras que el gobierno condenó el hecho.

“Mi hijo está debatiéndose entre la vida y la muerte, está en estado de coma”, dijo Wilma Pineda, madre de Edison Cocíos, alumno del Instituto Nacional Mejía, uno de los planteles públicos de varones de mayor tradición de Ecuador.

“No sé lo que pueda pasar, lo único que pido es que se haga justicia”, añadió la madre a periodistas en el hospital al cual fue llevado el joven tras recibir aparentemente un impacto de bomba lacrimógena en la cabeza, el jueves en el centro de Quito, donde los estudiantes protagonizaron una pedrea.

El presidente Rafael Correa lamentó el hecho, que prometió investigar, y responsabilizó a profesores que habrían incitado a los estudiantes a protestar.

La manifestación estudiantil coincidió con otra de maestros, que rechazan una nueva modalidad de bachillerato y una norma que aumentó de seis a ocho horas diarias su jornada laboral.

“No nos engañemos. Esto es lo que probablemente buscaban los irresponsables y violentos de siempre. ¡Qué tragedia!”, escribió Correa en su cuenta de Twitter, indicando que la situación de Cocíos “es realmente grave”.

“Prohibido olvidar quiénes son los que utilizan irresponsablemente a nuestros jóvenes. Nunca más estas tragedias. Se investigará todo”, añadió el mandatario.

El gobierno implantó una nueva modalidad de educación secundaria que eliminó las especializaciones y estableció que todos los estudiantes reciban la misma formación básica, actualizando un currículo de 1976.

Asimismo, el Ejecutivo dispuso que todas las instituciones educativas públicas sean mixtas.