El delantero internacional uruguayo Diego Forlán aseguró este lunes en su despedida tras fichar por el Inter Milán, de la Serie A del fútbol italiano, que “hoy en día uno se va siendo hincha del Atlético de Madrid” y dejó entrever que era una “oportunidad” que no podía dejar pasar.

“Lo vivido acá fue increíble, lo que me tocó vivir cada vez que oía el grito de uruguayo, a pesar de que pudimos tener aciertos, desaciertos, mis equivocaciones también… Lo importante es decirle a la gente que lo importante es el sentimiento que a uno le queda y hoy en día uno se va siendo hincha del Atlético de Madrid”, afirmó Forlán.

“A mis 33 años, ir a un club como el Inter no es una oportunidad que se produzca demasiado. Estoy satisfecho de la decisión que tomé, es normal que se vayan unos y vengan otros”, añadió el jugador.

Visiblemente emocionado, el delantero uruguayo recordó su vida en España desde que llegó al Villarreal en 2004 antes de fichar por el Atlético de Madrid en 2007 por 21 millones de euros, para asegurar que han sido “siete años espectaculares, con el cariño de la gente”.

“Desde que llegué hasta el día de hoy fueron cosas muy buenas las que viví acá”, añadió el artillero uruguayo, asegurando que de su época en el Atlético “me quedo con la clasificación para la ‘Champions’, la final de la Europa League, la final perdida de Copa (del Rey) y la Bota de Oro”.

Forlán, imprescindible en el club rojiblanco junto al argentino Sergio “Kun” Agüero, que también se ha ido al Manchester City, fue precisamente el héroe de esa final de la Europa League en 2010, en la que marcó los dos goles con los que el Atlético se impuso 2-1 al Fulham, aunque también ese año perdió la Copa del Rey ante el Sevilla.

El mejor jugador del Mundial de Sudáfrica 2010 también logró la única bota de oro con que cuenta el Atlético, cuando en la temporada 2008-2009 anotó 32 goles en 33 partidos de Liga.

“Estoy feliz por haber hecho feliz a tanta gente”, insistió el internacional uruguayo, que estuvo acompañado en su comparecencia ante los medios por el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, quien le entregó una placa conmemorativa.

Forlán elogió “lo vivido acá en el Atlético de Madrid, haber ganado los títulos, haber conocido gente espectacular dentro del plantel y la gente que trabaja” en el club, añadió ennumerando a una serie de miembros del club.

“Hay una banda que siempre va a quedar en mi corazón y la verdad es que fueron cuatro años de victorias, de derrotas, lo que queda es esa relación humana, que es lo que al final termina valorando la vida”, concluyó.