Los organizadores del torneo Abierto de tenis de Estados Unidos -US Open- indicaron que esperan inaugurar el lunes el último Gran Slam del año, pues las instalaciones de Flushing Meadows, donde se juega el torneo, sufrieron “daños mínimos” tras el paso de la tormenta Irene.
La perturbación ciclónica golpeó este domingo a Nueva York, provocando inundaciones y cortes de electricidad, tras dejar al menos catorce muertos durante su paso por la costa Este de Estados Unidos.
En un comunicado publicado en la página web del torneo, la Asociación de Tenis de Estados Unidos (USTA) aseguró que los organizadores estaban preparando el Centro Nacional de tenis Billie Jean King de Flushing Meadows (este de la ciudad) para el evento, que empezará a las 11H00 (15H00 GMT) del lunes.
Sin embargo, un inconveniente para el arranque del torneo podría ser la falta de transporte público, paralizado desde el sábado a causa de la tormenta.
USTA dijo que las autoridades del US Open estaban en contacto con funcionarios de la ciudad de Nueva York para conocer sobre de los servicios de metro y otros transportes públicos, así como las condiciones de las vías y “la posibilidad de iniciar el evento el lunes”.
Irene pasó sobre Nueva York con vientos de hasta 105 km/h, acompañados de abundantes lluvias, relámpagos, reportes de tornados y fuertes ráfagas de viento.