Dos días cumplió en huelga de hambre el estudiante de segundo año de Licenciatura en Historia de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Héctor Mancilla, como método para presionar al Gobierno para que dé una respuesta positiva a las demandas estudiantiles.

El joven está con ingesta de líquido cada dos horas, y es permanentemente monitoreado por alumnos de Medicina de la misca casa de estudios.