El presidente estadounidense, Barack Obama, admitió en una entrevista televisiva emitida el domingo que los estadounidenses que están luchando por conseguir un empleo no están satisfechos con sus resultados económicos.

“Hay una tasa de desempleo que sigue siendo demasiado alta, una economía que no está creciendo lo suficientemente rápido”, dijo Obama en una entrevista con CBS News grabada la semana pasada durante su gira en autocar por tres estados del país y centrada en temas económicos.

“Para mí, mira, de hecho hemos tomado las decisiones correctas y las cosas habrían sido mucho peores de no haberlas tomado, aunque eso no se vea de manera tan satisfactoria si no tienes trabajo ahora”.

“Entiendo eso y espero ser juzgado en un año sobre si las cosas fueron mejor”, afirmó en referencia a las elecciones de 2012, a las que se volverá a presentar.

El presidente desmintió los temores a una segunda recesión que hicieron derrumbarse a las bolsas, aunque reconoció que la crisis de la deuda europea, el tsunami de Japón y las revueltas de la primavera árabe tuvieron un impacto en el crecimiento económico.

“No creo que estemos en peligro de otra recesión, pero sí corremos el peligro de no tener una recuperación lo suficientemente rápida para enfrentarnos a lo que es una crisis de desempleo real para mucha gente. Por eso tenemos que hacer más”.

Endureciendo su tono, Obama acusó a los republicanos de bloquear sus planes para crear empleos y reactivar la economía y de poner su propio beneficio político por delante de las necesidades del país.

Actualmente de vacaciones en una exclusiva isla situada en Massachusetts (norte de Estados Unidos) con su esposa Michelle, sus hijas Sasha y Malia y amigos, Obama ha prometido desvelar a comienzos de septiembre un nuevo plan para crear empleos y relanzar el crecimiento.