Las autoridades chinas ordenaron el domingo el cierre inmediato de una planta química en Salian, noreste de China, donde durante la mañana más de 12.000 de personas manifestaran reclamando que fuera desplazada a otro lugar, indicó la agencia oficial China Nueva.

Habitantes de la ciudad portuaria de Dalian, en la provincia de Liaoning, se reagruparon el domingo por la mañana delante del ayuntamiento de la ciudad para protestar a gritos ante la presencia de centenares de policía, indicó la agencia oficial China Nueva.

Los manifestantes se inquietan por la actividad de una planta química que fabrica paraxileno -líquido inflamable utilizado en la producción de rollos y tejidos en poliéster-, propiedad del grupo Fujia.

Los habitantes que manifestaban desfilaron por las calles de Dalian, según las imágenes publicadas en el sitio Sina Weibo, equivalente chino de Twitter, esgrimiendo carteles en los que se podía leer: “Queremos sobrevivir, queremos un medioambiente sano, devuélvannos nuestro Dalian”.

Unos manifestantes se enfrentaron con la policía pero no se registraron heridos, según China Nueva.

Los censores chinos de internet bloquearon luego toda mención a Dalian en el sitio de Weibo.

El más alto responsable comunista de la ciudad, Tang Jun, y el alcalde, Li Wancai, prometieron mudar la planta fuera de la aglomeración, pero los manifestantes reclaman un verdadero calendario para esta operación, según la agencia.

El 8 de agosto, ocupantes de viviendas situadas cerca de la planta fueron evacuados. Una tormenta había provocado olas que rompieron un dique que protegía la planta y amenazaban con poner en peligro el edificio y provocar una polución química.

Los temores relacionados a las catástrofes ecológicas son numerosos en China, en donde el crecimiento económico fuerte de estos últimos años se logró a costas de la protección del medioambiente.

Uno de los movimientos de protesta más célebres se produjo en 2007 cuando los trabajos de construcción de una planta petroquímica en Xiamen (sureste) fueron abandonados luego de importantes manifestaciones.