Toda la comunidad lamenta la partida de Mauricio de la Parra, “el padre de los Temporales Teatrales” de Puerto Montt, quien se fue silenciosamente la tarde de este viernes dejando un legado de arte y recuerdos dificilmente olvidables para la ciudad y su arte.

A la hora de García Lorca, Mauricio de la Parra tomó sus notas, sus apuntes, sus observaciones y se fue, silenciosamente partió al encuentro de sus maestros en el teatro, a conocer al otro grande que nos dejó la semana pasada, Manoly, Mauricio nos dejó y con su partida queda una estela de recuerdos y rememoranzas.

Alejandro Bernales, Director del Consejo y la cultura recordó que Puerto Montt no se recuperaba de la muerte de su abuelo, Manoly, cuando llora la muerte del Padre de los temporales teatrales, un legado quer debe serpermanente dijo Bernales.

Pero Bernales destacó tambien la generosidad con que Mauricio trabajó no sólo en sus temporales, tambien en la Isla Grande, en Puerto Montt y ayudando a la elbaoración de politicas culturales.

Quien literalmente lloró la partida de Mauricio es su amigo y compañero de tablas, Rodrigo Cordoba, actor y dramaturgo quien señala enfatico que los temporales son el espejo de la ciudad, hechos con empeño y fuerza, tenian el mismo impetu del amigo que ya no está.

Rodrigo se emociona cuando recuerda la relacion con De la Parra, relación de cariños y odios, como todas las amistades fuertes, definiedolo con el concepto que siempre vertía.

Los restos de Mauricio seran velados en el salón municipal hasta el domingo cuando a las 11 de la mañana se le rinda un homenaje en el teatro Diego Rivera.