La organización internacional Oceana solicitó a la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, un completo informe sobre la presencia de mercurio en el carbón usado como combustible en centrales termoeléctricas en Chile, incluido aquel que se pretende explotar desde los distintos yacimientos ubicados en isla Riesco.
Además, la entidad defensora de la protección de los oceános pidió que se midieran las emisiones al aire de este metal en cada termoeléctrica, así como su presencia en especies marinas aledañas a sectores saturados de estas plantas.
“La liberación de mercurio al ambiente puede afectar gravemente la salud de las personas, especialmente de los niños y mujeres embarazadas. Las termoeléctricas a carbón son las mayores emisoras de este metal pesado y, por lo tanto, debemos saber si se está poniendo en riesgo la salud de la población”, señaló el director ejecutivo de Oceana, Alex Muñoz.
Oceana recalcó la importancia de medir los niveles de mercurio del carbón que se pretende explotar en las distintas minas de isla Riesco, en la región de Magallanes, así como su poder calorífico, para determinar su potencial de contaminación. La primera de esas minas, la “Mina Invierno”, será votada próximamente por el Comité de Ministros.