Cuatro miembros de las comunistas FARC murieron en un bombardeo a dos campamentos de esa guerrilla colombiana localizados a 19 millas de la frontera con Venezuela, informó este domingo el ministro de defensa, Rodrigo Rivera, quien destacó la colaboración del vecino país.
En el bombardeo también resultaron heridas dos jóvenes guerrilleras.
“Hemos logrado desmantelar esos dos reductos donde se estaban produciendo explosivos, armas no convencionales para provocar el terror de toda la zona oriental del país”, dijo Rivera a periodistas en la ciudad de Arauca, capital del fronterizo departamento (provincia) del mismo nombre.
Rivera agregó que la localización de los dos campamentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), es “la demostración de que el círculo lo estamos cerrando, y (que) la política de normalización y de fortalecimiento (de las relaciones) entre los dos países está dando resultado”.
“Es una demostración de que toda nuestra Fuerza Pública está ejerciendo control en la frontera con Venezuela, cerrando el cerco contra las estructuras narcoterroristas que pretenden usar la frontera como una especie de refugio”, agregó.
De acuerdo con el informe del ministro, en los dos campamentos, descubiertos escondidos entre la selva, se encontró una tonelada de explosivos, 300 granadas de mortero y minas antipersona.
Las FARC es la principal guerrilla del país, con 47 años de lucha armada contra el Estado y actualmente cuentan con unos 8.000 combatientes según el Ministerio de Defensa, aunque un estimativo de una ONG le atribuye al menos 10.000.