La justicia francesa abrió el viernes una investigación preliminar sobre la demanda de la joven francesa Tristane Banon contra Dominique Strauss-Kahn, al que acusa de intento de violación en París en 2003, un delito por el que también está inculpado en Estados Unidos.

La decisión anunciada el viernes por la Fiscalía de París es un primer paso en el procedimiento judicial francés contra el ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI) que es objeto de una denuncia similar -entre otros cargos- por una mucama de un gran hotel de Nueva York.

La investigación preliminar en Francia, cuyo objetivo es verificar las denuncias de Banon, estará a cargo de la Brigada de Represión de la Delincuencia contra Personas (BRDP), indicó una fuente judicial.

Tristane Banon, de 32 años, afirma que Dominique Strauss-Kahn, de 62 años, intentó violarla en 2003 en un apartamento parisino casi vacío adonde acudió a entrevistarlo para un ensayo que la joven estaba escribiendo por aquel entonces.

“Tenemos elementos materiales, mensajes de texto enviados y existen atestaciones”, sostuvo el abogado de Banon, David Koubbi. “Numerosas personas están a disposición de la justicia para atestiguar”, afirmó el letrado tras advertir que la demanda no se limitará a “una palabra contra la otra”.

Dominique Strauss-Kahn, que en un libro calificó la denuncia de Banon de hechos “imaginarios”, anunció el lunes a través de sus abogados que la demandará por “denuncia calumniosa”.

Según el diario Le Monde del viernes, los agentes de la BRDP tratarán de conocer los más mínimos detalles de lo ocurrido el 11 de febrero de 2003 y verificar, por ejemplo, la exactitud de los lugares descritos en la querella.

El miércoles tras recibir la demanda, la Fiscalía podía archivarla, abrir una investigación preliminar o designar un juez de instrucción.

Tristane Banon afirma que entonces su madre, una dirigente socialista, la convenció de que no denunciara lo ocurrido en el apartamento, al que había acudido para efectuar una segunda entrevista a Strauss-Kahn, entonces diputado, alcalde y ex ministro de Economía.

En 2007, al relatar el episodio en una emisión mundana de televisión, y en mayo pasado, tras estallar el escándalo neoyorquino, Tristane Banon dijo que había sido víctima de agresión sexual por parte del dirigente francés, pero la actual demanda contra el ex director del FMI es por intento de violación.

El intento de violación es un delito que prescribe al cabo de diez años y que puede suponer 15 años de cárcel. El delito de agresión sexual prescribe al cabo de tres años.

En una entrevista a la revista L’Express de esta semana Banon refirió algunos “detalles sórdidos” del supuesto comportamiento de Strauss-Kahn: “Me arrancó los vaqueros y el sostén”, puso “sus dedos en mi boca”, “sus manos en mi braga” y “comprendí que realmente me quería violar”.

“En el intento de violación, hay forzosamente un intento de penetración. En la agresión sexual no”, explicó un abogado parisino, Claude Katz.

“¿Intentó una penetración? Esa es la pregunta. Aunque ocho años después, será muy difícil de zanjar”, advirtió ese letrado.

Frente a quienes la critican por haber tardado ocho años en denunciar lo ocurrido ante la justicia, Tristane Banon, menuda y paliducha, descrita por sus allegados como una persona “frágil”, se defendió estos días afirmando: “Ya no soporto seguir escuchando que soy una mentirosa porque no he presentado una demanda”.

Aunque el procedimiento judicial entablado en Nueva York contra Strauss-Kahn, acusado de intentar violar a una camarera de un gran hotel de esa ciudad parecía desinflarse debido a las “reiteradas mentiras” de la víctima a la justicia, el fiscal, Cyrus Vance, afirmó que la investigación seguirá adelante y que mantiene los siete cargos contra el ex jefe del FMI, entre éstos agresión sexual e intento de violación.