Unos ocho kilos de cocaína fueron decomisados por funcionarios de la Brigada Investigadora del Crimen Organizado (Brico) de la PDI al detener a tres personas, dos de ellas de nacionalidad boliviana, quienes conformaban una organización criminal que ingresaba estupefacientes a Chile.

Según los detectives, destaca la forma en que venía oculta la sustancia ilícita, en dobles fondos de cajas de cartón, distribuida en 16 láminas que estaban recubiertas y a la vista no se observaba nada.

La unidad especializada realizaba las diligencias desde hace unos tres meses y seguía los pasos del chileno, quien operaba en la capital. Un trabajo de inteligencia permitió establecer el momento en que iba a llegar un cargamento.

Ayer Luis Osvaldo Arenas Morales (44 años) se dirigió hasta Alameda con General Velásquez, donde debía reunirse con los bolivianos María Guarachi López (24) y Fabián Basualdo León (35), quienes entregaron dos cajas.

En ese momento aparecieron los policías y detuvieron a las tres personas y en las cajas se encontraban utensilios de cocina y no estaba la droga. Sin embargo, llamó la atención que ambas pesaban más de lo normal. En una acuciosa revisión se detectó que tenían dobles fondos, donde estaban 16 planchetas del alcaloide.

Los ocho kilos permiten la elaboración de unas 160 mil dosis, avaluadas en 150 millones de pesos. El modus operandi usado por los detenidos es algo nuevo, pues no se había detectado un ocultamiento de la droga en cajas de cartón.

Con la detención se incautaron diez teléfonos celulares, 500 dólares, 300 mil pesos y 600 bolivianos en efectivo. La Brico también allanó dos casas ubicadas en Renca, donde se hallaron precursores químicos para aumentar el volumen de la cocaína.

El trío de imputados enfrentará en la presente jornada la audiencia de control de detención en el Centro de Justicia de Santiago, imputados de infracción a la Ley de Control de Drogas.