Una agrupación campesina de La Paz planteó al Congreso boliviano la aprobación de una ley de seguridad ciudadana que autorice el uso de armas de fuego para defensa personal, propuesta que provocó este jueves reacciones adversas.

“Cansados de tanta inseguridad ciudadana queremos poder defendernos de los delincuentes en equidad de condiciones” y por ello “pretendemos que se permita reglamentar el uso de armas para que las víctimas puedan salir en defensa de su integridad física”, señaló un documento de la organización sindical campesina.

El Consejo Nacional de Ayllus y Marcas Qullasuyo de La Paz (Conamaq), que congrega a la etnia aymara, consideró que el asalto a domicilios creció en los últimos años en un 20% y los atracos a vehículos en un 13%, según el principal dirigente de la entidad, Carmelo Titirico.

La propuesta fue considerada por el diputado de oposición Roy Moroni de “un contrasentido y un absurdo: quien tenga un arma de mayor calibre será el más respetado del pueblo o la ciudad; eso es retroceder en el tiempo”, manifestó.

La iniciativa fue planteada de cara a una cumbre que se celebrará en mayo para fortalecer el plan nacional de seguridad ciudadana y estudiar “modificaciones a la legislación para combatir contra el crimen organizado”, según el ministro de Gobierno (Interior), Sacha Llorenti.

La cumbre de seguridad ciudadana fue anunciada tras recibir el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, una superficial herida de bala en la cabeza cuando intentaba evitar el atraco a una persona.

Santa Cruz es presa de la violencia a raíz de la creciente presencia del narcotráfico en esa región del este boliviano, según Costas, uno de los principales líderes de la oposición al gobierno del presidente Evo Morales.