Mohammed el-Senoussi, príncipe heredero de Libia en el exilio, prometió este miércoles que hará “todo lo posible” para contribuir a la creación de un Estado democrático en su país, donde el líder Muamar Gadafi se aferra al poder pese a la ofensiva de los rebeldes y la OTAN.

“Es el pueblo libio quien debe decidir si quiere encaminarse hacia una monarquía constitucional o una república”, declaró el príncipe heredero en una intervención ante el Parlamento Europeo en Bruselas.

La Constitución libia de 1951, que establecía una monarquía constitucional y designaba como rey al tío de El-Senoussi, Mohammed Idris al Mahdi el-Senoussi, “podría constituir la base de una nueva Libia si es modernizada adecuadamente”, añadió.

“Mi papel es claro: independientemente de si el pueblo quiere o no una monarquía constitucional, voy a hacer todo lo posible para contribuir a crear un Estado democrático poara los libios, fundado en un parlamento representativo elegido en elecciones libres y justas”, prometió.

Sobre el Consejo Nacional de Transición, El-Senoussi afirmó mantener “buenas relaciones” con este órgano que reúne a la rebelión contra Gadafi y cuya partida la comunidad internacional trata de precipitar apoyada en una campaña aérea de la OTAN.

El-Senoussi, de 48 años, es el sobrino del rey pro-británico Idriss I, destronado por Gadafi tras un golpe de Estado en 1969. Su padre emigró poco después con su familia a Londres.