Desde que nacemos debemos lidiar, elegir y actuar en el marco de la libertad. Así con añejas excepciones, ha sido en Chile en la mayoría de los ámbitos. En el deporte, tanto o más que en política, sucede que a nivel profesional, el poder y el afán de controlar, son drogas que cautivan.

En el proceso de la “Roja” de Bielsa ambas herramientas fueron utilizadas en pos del desarrollo. Muchas veces, cayeron en la exageración, pero hoy los jugadores, como el estable y consolidado Mauricio Isla, reconocen que les hacía falta y que desean mantener esa disciplina, porque la experiencia es buena y los resultados, para que decir.

Acá, en el tercer piso del Palace Monte Real, hay profesionales del fútbol que se niegan a cambiar el chip. Mientras el DT dice que hay libertad para moverse dentro del hotel, jugar play station, conversar con periodistas en exclusiva y también les ofreció un viaje histórico y cultural, el grupo prefirió mantenerse encerrado en sus piezas y no ir a Fátima a 40 km, para que “nadie” piense que andan de paseo.

Un comentarista y ex jugador decía que los chilenos somos hijos del rigor y es probable. Pero no hay que confundir. Una cosa es ser metódico, responsable y disciplinado en busca del éxito y las metas; otra es la deshumanización de un plantel que actuó o aprendió a trabajar robóticamente los últimos 4 años perdiendo toda autenticidad, a cambio de la seriedad y eficiencia.

En el estadio municipal de Leiría el colorido invitaba a la alegría y está transformada en risas de los jugadores, volvió a la práctica gracias a Claudio Borghi.

El técnico, constante provocador de empatías ha sabido llenar nuevamente la cancha con espontaneidad. Al doble 5 que pondrá en el medio, quiere agregar el sello de un diez “libre” que escoja en cada tiempo y lugar en el partido por donde jugar. También, quiere hacer funcionar en los puestos a quienes define como especialistas.

Pero, queda claro que para el “Bichi” esto es entretención, divertimento y juego, más allá de la pasión y la presión. El primer día, usó a 3 en el fondo y probó con Contreras. Ayer usó a “Pepe” Rojas como sttoper por izquierda y hoy vuelve a Contreras junto a Jara y Ponce para colocar a Isla Carmona, Medel y Vidal por izquierda, pese a que toda la semana, se habló del volante del Leverkusen como central en esa zona.

“Mati” será el encargado de la creación y de cada pelota detenida, pero también responsable de recuperar su propio placer por jugar al fútbol, para volver a ser ese “Matigol” que se quedó recibiendo en Paraguay el premio al mejor de América.

Sánchez y Beausejour se veían en punta en esta privada por la maldición del 9 que no solo lo privó al ex DT de Colo Colo de “Chupete” o Esteban Paredes, sino que la rebelde contextura de Pinilla marginó al delantero de Palermo y una maldita gripe que también nos “torea”, puso en jaque a Mancilla.

Bielsa no quería nada al azar y el control era prioridad. La libertad era una palabra no una realidad. El “Bichi” disfruta de las cosas simples y cree de verdad en la democracia y libertad para sacar adelante su planificación y este proceso de selección. En la cancha veremos entonces si la alegría conseguida con una dictadura se sostiene en democracia.

El deporte tiene esas cosas….

Eugenio Salinas

Eugenio Salinas

Eugenio Salinas es periodista deportivo de ksp.cl y ESPN Radio Bío-Bío Deportes.