El presidente uruguayo José Mujica rechazó este lunes la intervención de una coalición internacional en Libia, calificando la operación de “un contrasentido inexplicable”.

“Este ataque implica un retroceso en el orden internacional vigente”, dijo Mujica, ex guerrillero y segundo presidente de izquierda en la historia de Uruguay.

“Es mucho peor el remedio que la enfermedad. Eso de salvar vidas a los bombazos es un contrasentido inexplicable”, añadió. “Todo esto es para llorar”.

El ministro de Defensa, Luis Rosadilla, dijo por su parte a radio Montecarlo que la intervención en Libia “complica el escenario internacional”. “Esto no se puede compartir ni admitir”.

El fin de semana, el Plenario del partido gobernante Frente Amplio emitió una declaración de rechazo a la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que habilitó la intervención en Libia, reivindicando “la libre determinación de los pueblos y la no intervención en sus asuntos internos”.

En cambio, el ministro interino de Relaciones Exteriores, Roberto Conde, indicó el lunes en declaraciones a la prensa que como la intervención en Libia fue “avalada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas” Uruguay “no la va a discutir ni cuestionar”.

Conde observó de todas maneras que le cabe a todos los países “analizar si el despliegue y la operación que se está llevando a cabo se encuadra dentro de los objetivos que el Consejo de Seguridad ha determinado” o si “deriva hacia una intervención en los asuntos internos de Libia”.

“Ese es el delicado equilibrio que tenemos que observar”, indicó.

Consultado sobre las afirmaciones del presidente Mujica, sostuvo que éste “hizo una declaración política, de corte humanista y universal, haciendo una reflexión (…) respecto al uso de la violencia y la protección de la vida de los civiles, que puede aplicarse a la situacion libia o a una reflexión general de cualquier otro acontecimiento internacional”.

En febrero, el gobierno uruguayo había condenado la violencia contra la población en Libia tras el inicio de la insurrección popular y exhortó al gobierno de ese país a “promover un diálogo constructivo”.