El ministro italiano de Relaciones Exteriores, Franco Frattini, abogó el lunes en Bruselas por que la OTAN tome el mando de la operación militar en Libia, dando a entender que de lo contrario Roma podría dejar de autorizar el uso de las bases aéreas italianas.

“Si la OTAN no garantiza rápidamente la coordinación de las operaciones militares, deberemos estudiar un medio para que Italia asuma por sí misma la responsabilidad del control de las bases” situadas en su territorio, afirmó Frattini al término de una reunión de ministros europeos de Relaciones Exteriores dedicada a Libia.

“Es la OTAN la que debe tomar la iniciativa”, insistió el jefe de la diplomacia italiana, lamentando que cada país de la coalición actúe, según él, sin informar a sus socios.

“Todos los miembros de la coalición necesitan saber lo que hacen los demás y la OTAN tiene la experiencia para ello”, afirmó.