El próximo embajador estadounidense en México debe tener “una actitud mucho más respetuosa” que el renunciante Carlos Pascual, cuyos cables diplomáticos causaron malestar en el gobierno y otros sectores, declaró el sábado un dirigente del partido opositor PRD.

“Espero que el próximo embajador vea lo que ocurrió con su antecesor, aprenda de esta experiencia y venga con una actitud mucho más respetuosa en lo que dice, opina e informa a su gobierno”, dijo a la AFP Carlos Navarrete, senador y coordinador del izquierdista PRD (Partido de la Revolución Democrática) en el Senado.

La secretaria de Estado Hillary Clinton anunció el sábado la renuncia de su embajador en México, Carlos Pascual, después de que el presidente Felipe Calderón dijo que los cables diplomáticos del funcionario revelados por Wikileaks habían dañado las relaciones bilaterales.

El gobierno mexicano no ofreció de inmediato ninguna declaración sobre la renuncia de Pascual.

Los cables diplomáticos del embajador presentaron a la jefatura militar mexicana como poco preparada cuando Calderón decidió desplegar a miles de soldados para hacer frente al narcotráfico en diciembre de 2006.

“Pascual demostró poco respeto por las Fuerzas Armadas mexicanas”, afirmó Navarrete. “La revelación de Wikileaks y la reacción que hubo en el país mostraron que el embajador estaba en una situación precaria y que los puentes de comunicación estaban dañados. Su presencia en México no le hacía ningún bien a la relación bilateral”, agregó.

El senador sostuvo que la salida de Pascual pudo ser producto principalmente de las molestias que le habría transmitido Calderón a Barack Obama en su reunión de inicios de marzo en Washington, pero también de la posición contraria a su labor de “otros actores como las Fuerzas Armadas o el Congreso”.

La canciller Patricia Espinosa afirmó el jueves en una audiencia en el Senado que Pascual mantenía una relación fluida con el gobierno. Sin embargo, el diario Reforma publicó a principios de marzo que Calderón llevaba tres meses sin recibir al diplomático.