Discrepancias entre economistas ha ocasionado el nuevo mecanismo de atenuación a precios de los combustibles. Mientras algunos sostienen que es suficiente, otros aseguran que no permitirá mitigar futuras alzas de las bencinas por ser transitorio.

Grandes diferencias ha generado entre economistas y expertos el Sistema de Protección ante variación de los Precios de los Combustibles, el Sipco, ya que algunos aseguran que este mecanismo cumplirá con su objetivo inicial de atenuar los valores de las bencinas de manera transitoria. Sin embargo, otros analistas sugieren una herramienta permanente en este caso.

Para el economista de la Universidad Católoca, Juan Eduardo Coeymans, lo que se pretende con el Sipco es atenuar alzas transitorias de los combustibles y eliminar potenciales fluctuaciones al respecto.

Visión con la que discrepó el economista de Gemines Consultores, Alejandro Fernández, quien indicó que las modificaciones que se están haciendo en el sistema antes que entre en funcionamiento es una mala señal, ya que sugiere que es un mecanismo inestable.

En esta misma línea, el presidente de la Asociación de Distribuidores de Combustibles, Fernando Rodríguez, señaló que el mecanismo de atenuación al precio de los combustibles NO soluciona en nada el problema, ya que es necesario un sistema permanente.

Fernández aseguró que en los próximos días, y a través de la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa, entregarán una solicitud a los ministerios de Economía y Hacienda para que evalúen la permanencia del impuesto específico de los Combustibles, que otorga al fisco unos mil 700 millones de dólares anuales.